Quienes me sigáis desde hace unos años sabréis que además de la fotografía de conciertos, estoy bastante especializada en fotografía de espectáculos de burlesque.
La primera vez que presencié (y fotografié) un número de burlesque fue en 2009, cuando participé como fotógrafa en el Aces & Faces, una fiesta de mods y rockers (¿o debería decir mods vs rockers?) organizada en la Sala Apolo.
Era una gran fiesta temática con actuaciones de grupos en directo, combinado con concurso de baile y hasta el sorteo de una Vespa. Había un ambiente muy auténtico y muchos asistentes de ambos bandos (aunque ahora basándome mis fotos predominaron los rockers). Por supuesto había espectáculos de burlesque, y en aquella ocasión estuvieron a cargo de toda una estrella local del burlesque, Evita Mansfield. Ella fue la que me abrió los ojos al mundo sexy y divertido de los shows de burlesque en directo, un mundo donde se celebra el orgullo de ser mujer, con gestos tan coquetos como provocativos y preciosos corsés, boas de plumas y zapatos de tacón.
Entonces yo no estaba familiarizada aún con ese tipo de espectáculo y la luz fue más bien escasa, pero la experiencia fue suficiente para estrenarme en este campo tras la cámara y cómo no, de quedarme con ganas de más.
Ese más llegaría unos meses después, ya en 2010, en la misma Sala Apolo de la mano del TABOO. Allí volvería a hacer fotos en varias ocasiones a Evita Mansfield, con bastante mejor luz y sobretodo, con más experiencia.
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